Brenlx

Ya estoy otra vez en Alicante. El lunes de la semana pasada dejé mi temporal bastión en Benicarló para hacer más de 3 horas de constante carretera plantarme de nuevo aquí, en mi tierra. No tuve que esperar mucho, la verdad. El jueves ya me estaban llamando para ocupar un puesto de sustitución en... Elx!!!!. Al principio pensé que había tenido mucha suerte y que desde mi casa hasta el instituto habían apenas unos 20 minutos de camino, así que me alegré y todo. Lo que no sabía es que me había tocado en uno de los peores institutos de todo Elx: el Monserrat Roig, o como algunos lo llaman: el Brenlx (contracción de Bronx y Elx). El caso es que, al parecer el tio al que sustituyo, se ha marchado por depresión. Vaya tela con lo que me he encontrado allí. Desde primero a tercero, tengo la peor flora y fauna de todo polígono de Carrús. Desde el primer día me están midiendo el pulso, y a los diez minutos de entrar en la primera clase(que eran los de primero de la ESO) un nanomierda me mira y me dice que yo no voy a durar allí ni una semana. Entre los personajillos que tengo en mis aulas podemos encontrar: un neonazi de 12 años que se llama mohamed(parece imposible pero es cierto), varios onanistas(o pajilleros si se prefiere) empedernidos y que se masturban en clase, cuatro futuras prostitutas con las que no puedes hablar si no es en la presencia de otros profesores porque te pueden llegar a acusar de violación, un sinfin de disruptores(que no es otra cosa que hijos de puta que quieren boicotearte la clase por todos los medio), varios niñatos frikis, dos emos, unos 20 o 30 fumetas, un heavy, dos chivatos que ya han ido a sus respectivos tutores a decir que soy un cabrón, y mucha mucha mucha mala hostia concentrada en todas las aulas, combinada con un interés y conocimientos nulos de la asignatura.

Todo esto no quiere decir que esté acojonado. A ver, desde el jueves estoy un poco más preocupado, y, la verdad, cuando entro al aula, salvo excepciones, no disfruto en absoluto. Es como si me estuviera prostituyendo. Lo cierto es que estoy empezando a reflexionar y a planear cómo hacerme con toda esta panda de cabrones sin que por ello la comisión de convivencia venga a cortarme las pelotas. Así que voy a meditar y a actuar en consecuencia. Es una prueba más que me ayudará a ser mejor persona y a templar mis nervios.

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Tiempo en el infierno: 2 días

Tiempo trabajado: 110 días